woensdag 16 januari 2008

Spam sexista

Está claro, hasta el spam es sexista. Porque si no que me expliquen a mí porqué todos los emails que recibo al día y que nada tienen que ver con mi trabajo llevan títulos tan femeninos como: "Haga crecer su pene (con foto de una rubia desnuda agarrada a un pene tan grande como una farola)" y "Lo mejor de Adobe Acrobat (con foto de un sonriente hombre detrás del ordenador)". Que me lo expliquen, porque a mi no se me ocurre otra cosa más que la persona que está detrás de todas estas campañas publicitarias tiene un cerebro tan reducido que piensa que todas las mujeres soñamos con un pene taladrador de como mínimo 4 metros cuadrados y que además no sabemos usar el ordenador. La única vez que recibí un email dedicado a promocionar otros productos que no fueran destinados al placer sexual y con la foto de una hembra fué uno titulado: "Software for dummies". Con esto queda todo dicho.

Pues ya estoy harta. Ya que tenemos que soportar cientos de emails basura todos los días, al menos que nos manden algo creativo, por favor. O que sean capaces de distinguir al desinatario y hacer su trabajo de marketing bien (que para eso tienen los datos personales de medio mundo) y enterarse de quien tiene pene y quien no, y quien tiene cerebro y quien no.

Y ya no quiero ni hablar de las cartas estas de VIPs africanos a los que se les ha muerto la familia entera, chacha zulú incluida, y quieren que les des tu cuenta bancaria para depositar en ella toda la herencia. Pero es que verdaderamente creen que la gente es gilipollas? Supongo que si lo hacen es porque alguien pica. Lo cierto es que pueden alegrarte el día. La semana pasada pude hacerme la ilusión de ser millonaria, porque recibí cuatro emails premiándome cada uno con 2 millones de Euros. Entre estos y los siete africanos que me han escrito últimamente cierro el chiringo y me monto un banco privado en Suiza. O quizás mejor, una empresa de spam creativo. Me gustaría saber quienes son las empresas detrás de esta invasion de emails, más que para quejarme para ofrecerle mis servicios como creadora de contenidos y claro, si me cogen el teléfono, para decirle a quien corresponda que ya tengo Adobe, sé cómo usarlo y no tengo pene!